Cuaderno de los Balcanes 07: Rumbo a Belgrado
Llega la hora de salir rumbo a Belgrado. Pago el café y dejo la escena de los cuatro paramilitares congelada a mis espaldas. Las ventanas del ómnibus están empañadas. Esa opacidad me recuerda que el territorio que voy a cruzar, la República Serbia de Bosnia, es una tierra hundida en la niebla. Hogar del bando al que se le ha dado el papel del villano en esta historia de horror que fue la guerra de Bosnia. Con la mano abro una pequeña zona de claridad en el vidrio. Mientras salimos de la ciudad se ven casas a medio construir y muchos más policías que en la Sarajevo musulmana. Vamos montaña arriba pasando por pequeños poblados campesinos que se han ido uniendo a la Sarajevo serbia, que se estira a lo largo de la carretera. El espacio que hay entre aldea y aldea, que antes era campo, ahora está cubierto por casas recién construidas o a medio construir.
Pienso que deben ser los nuevos hogares de familias desplazadas por la guerra, que encontraron aquí, en esta zona satanizada por el Sitio, el refugio ante la pérdida de su Krajina. Esta palabra eslava significa frontera, o confín, pero también terruño. Para la historia balcánica nombra los viejos confines donde los serbios peleaban al servicio del Imperio Austro-Húngaro para detener a los turcos que amenazaban Occidente. Siglos después, fue allí donde los descendientes de esos guerreros se amotinaron cuando Croacia declaró su independencia. En respuesta al nuevo país que se separaba de Yugoslavia, crearon su propio y efímero país: la República Serbia de Krajina. Luego de algunos meses fueron expulsados por el ejército croata. Ahora viven como refugiados. Probablemente, algunas de esas familias viven en estas casas que veo por la ventanilla.
Allá abajo está Sarajevo. Desde estas colinas que ahora trepamos con el motor forzando la marcha, se bombardeó la ciudad día tras día durante el Sitio que comenzó en abril de 1992 y que convirtió en rehenes a su medio millón de habitantes. Desde mi asiento tengo la misma panorámica que tenía la artillería serbia. Se ven claramente los minaretes de las mezquitas y el viejo edificio de la biblioteca construída por los Habsburgo en estilo morisco. Se puede elegir el blanco fácilmente. Y disparar.
==Septima parte de diez
* 1- Split/ Croacia
* 2- Camino a Sarajevo
* 3- En Sarajevo
* 4- La dama y el cellista
* 5- El río de Ulises
* 6- El lado serbio de la ciudad
* 8- En la frontera
* 9- La ciudad blanca
* 10- Kalemegdam
(Artículo de Roberto López Belloso publicado en Brecha el 10 de mayo de 2002)
Pienso que deben ser los nuevos hogares de familias desplazadas por la guerra, que encontraron aquí, en esta zona satanizada por el Sitio, el refugio ante la pérdida de su Krajina. Esta palabra eslava significa frontera, o confín, pero también terruño. Para la historia balcánica nombra los viejos confines donde los serbios peleaban al servicio del Imperio Austro-Húngaro para detener a los turcos que amenazaban Occidente. Siglos después, fue allí donde los descendientes de esos guerreros se amotinaron cuando Croacia declaró su independencia. En respuesta al nuevo país que se separaba de Yugoslavia, crearon su propio y efímero país: la República Serbia de Krajina. Luego de algunos meses fueron expulsados por el ejército croata. Ahora viven como refugiados. Probablemente, algunas de esas familias viven en estas casas que veo por la ventanilla.
Allá abajo está Sarajevo. Desde estas colinas que ahora trepamos con el motor forzando la marcha, se bombardeó la ciudad día tras día durante el Sitio que comenzó en abril de 1992 y que convirtió en rehenes a su medio millón de habitantes. Desde mi asiento tengo la misma panorámica que tenía la artillería serbia. Se ven claramente los minaretes de las mezquitas y el viejo edificio de la biblioteca construída por los Habsburgo en estilo morisco. Se puede elegir el blanco fácilmente. Y disparar.
==Septima parte de diez
* 1- Split/ Croacia
* 2- Camino a Sarajevo
* 3- En Sarajevo
* 4- La dama y el cellista
* 5- El río de Ulises
* 6- El lado serbio de la ciudad
* 8- En la frontera
* 9- La ciudad blanca
* 10- Kalemegdam
(Artículo de Roberto López Belloso publicado en Brecha el 10 de mayo de 2002)
Etiquetas: Balcanes, Bosnia, Elegidas, Primer Cuaderno
<< Home